Somos testigos de muchos casos de éxito con el uso de efectos especiales, pero ¿hemos identificado en qué consisten? igual y después de leer este post no podrás evitar volver a ver esa peli que tanto te sorprendió, quizá vuelvas a sorprenderte cuando notes la diferencia entre los efectos especiales y la realidad. (Puedes leer la primera parte aquí)
Por: Jonathan Guillén
Desde hace unos años y debido a la utilización sin criterio de los FX digitales, el público se ha cansado del “look computarizado” o “look de videojuego” de algunas películas en lo que se refiere a las tomas de FX y por ello agradecen cuando en esa toma ven y notan que se ha realizado físicamente, utilizando con criterio los cables, la cámara… y la ayuda digital sólo para borrado de las protecciones y elementos técnicos empleados en la realización de la toma, como cables, reflejos del equipo, marcas, etc. Y esto también ha contribuido a que en muchas ocasiones se alaben películas que parecen “tradicionales” en cuanto a la realización de los efectos. Como ejemplo se puede ver que el 90% de las críticas y comentarios sobre Mad Max alaban la valentía de rodar los stunts físicamente y con grandes aparatos y dispositivos que garanticen la seguridad de los especialistas, equipo y actores que después se borrarán digitalmente. Sin embargo Mad Max es una muestra perfecta de la tecnología digital utilizada con criterio, casi nunca como protagonista principal de una toma pero sí para ampliar el espectro y la ambición de la película. Desde borrar lo que sobra del brazo mecánico de Furiosa, interpretada por Charlize Theron hasta poner más de 40 coches y extras digitales en las tomas de persecución, eso sin contar montañas, el cañón donde Furiosa atrae a los “War Boys” o la Ciudadela, gobernada por el malvado Immortan Joe, son escenarios y elementos totalmente generados por ordenador, además de tomas grabadas de día y convertidas digitalmente a noche, poblar escenas con multitudes, aumentar el polvo que despiden los coches y el fuego de las explosiones que se producen; George Miller siempre los utiliza como soporte para cada toma cuyo elemento principal haya sido rodado físicamente, lo cual no sólo añade una referencia real a los artistas para crear más elementos, sino que ayuda a los actores y al equipo de rodaje y post-producción a trabajar más rápido al tener una placa que es un 70% de lo que será finalmente, cuando en muchos casos, con FX, la toma es poco más de un 40% del resultado final.
Seguidamente podéis ver algunos “antes y después” de la película de George Miller (no hay Spoilers): Como dice cualquier supervisor de efectos visuales, “los FX siempre deben estar al servicio de la historia y no la inversa”. Por ejemplo, la película de Matt Reeves El Amanecer del Planeta de los Simios estrenada el verano pasado y con muy buenas críticas, depende por completo de los FX Digitales para recrear todos los simios, a través de la mencionada técnica de Performance Capture (Avatar). Así César, Koba, Maurice y el resto de primates de esa película están generados por ordenador utilizando la actuación de Serkis, Kebell y el resto de actores que interpretan a los simios, como referencia 1:1. Por lo tanto, objetivamente, esta película es un festival de efectos, una orgía digital dirían algunos, pero lo que este film prueba es que no es cuestión de cantidad, sino de propiedad, de cuándo y cómo utilizar los FX digitales y qué deben contener para hacerlo. Y no creemos que alguien pueda decir que Andy Serkis como el simio revolucionario César, no se merezca una nominación a los premios de la Academia, pese a que su actuación pase por el filtro digital.
En definitiva, no sólo hay que saber cuándo y cómo utilizarlos sino también cuánto y dónde, de forma que la transición entre digital y real sea imperceptible, que es la finalidad de todo efecto visual. Unos malos FX pueden hacer difícil apreciar una buena historia y unos buenos FX al servicio de una historia mal contada o sin interés, no tendrá el impacto que se buscaría, por muy perfectos que sean.
Los FX están para darle más empaque, para finalizar la película y actualmente, para que cada plano se acerque al 100% de lo que el director busca.
Jonathan Guillén Ros. Amante del cine y cineasta desde los 16 años. Ha dirigido 9 cortometrajes, realizado más de 50 vídeos profesionales en varios ámbitos y, también ha sido supervisor de FX para 5 cortometrajes y 2 largometrajes, uno de ellos actualmente en fase de rodaje. Además estudió periodismo y es un apasionado de todo tipo de cine, tanto por las propias películas como por la gente que trabaja en ellas. Desde los 23 años ha estado compaginando su trabajo como cineasta con el trabajo en el campo del Marketing Online, experiencia que le ha dado una perspectiva muy amplia sobre qué contenido poner y cómo ponerlo para atraer visitas y lectores.
Pueden ver algunos de sus trabajos en:
www.vimeo.com/jonathanguillenros